Jueves de Cine: De nuevo el miedo a los medios.

Jueves 3.4.2025 

De nuevo el miedo a los medios


Uno.- Querides lectores, en las últimas semanas una serie en la plataforma de streaming Netflix, ha estado causando comentarios y análisis de todo tipo; Adolescencia (Adolescence, 2025) miniserie de drama criminal británica, creada por Jack Thorne y Stephen Graham y dirigida magistralmente por Philip Barantini. La serie gira en torno a Jamie, un joven de 13 años que es arrestado acusado de asesinar a una compañera de clase, Katie. 

Dos.- Antes de compartir mi opinión sobre la misma, es importante mencionar los aspectos técnicos de la misma: cada episodio está rodado al milímetro en un plano secuencia, es decir, sin cortes de cámaras, mediante una continuidad total de una escena, lo que no sólo refleja una extraordinaria producción, sino que nos coloca como observadores de primera fila y, en ocasiones, nos permite estar a centímetros de atravesar la barrera de las dos dimensiones. Además se arriesga como pocas obras en la historia del cine, ya que son pocos, por ejemplo obras maestras como 'Sed de mal' (Orson Welles, 1958), 'Hard Boiled (Hervidero)' (John Woo, 1992), 'Hijos de los hombres' (Alfonso Cuarón, 2006), 'El secreto de sus ojos' (Juan José Campanella, 2009), '1917' (Sam Mendes, 2020) y la reciente 'Atrapados en un bucle infinito' (Junta Yamaguchi, 2023). Como se ve, son pocos los realizadores que se han atrevido a rodar toda la obra en un solo plano.

Tres.- La trama: Jamie Miller, un chico de trece años, es arrestado por el asesinato de una compañera de clase, pero la trama no gira en torno a resolver el asesinato, sino en torno a complejos desarrollos de personajes y detectives que quieren conocer el motivo.

Cuatro.- No pasa mucho tiempo para ver cómo se justifica el operativo por parte de la policia británica para aprehender a Jamie, quien asegura que no "hizo nada malo" y que incluso termina orinándose del miedo ante el monopolio del uso de la fuerza. Nadie puede explicarse el porqué, incluso la audiencia puede llegar a creer en la inocencia de Jamie, y empatizar con éste y su familia, ya que los cuatro episodios de los que consta la serie logran que el espectador se sienta muy cerca de Jamie, no únicamente cuando se orina durante su detención, sino también cuando llora de miedo bajo custodia policial, ante los exámenes periciales o tiene una rabieta durante el examen psicológico.

Cinco.- Pero la verdad es que Jamie es un asesino a sangre fría, el público sabe desde el principio que Jamie es culpable. Los investigadores nos muestran un video de vigilancia en el que se le ve apuñalando a Katie por la espalda. La serie no se pregunta si lo hizo, sino por qué. Y es aquí donde vale la pena profundizar en las razones por la que un adolescente podría llegar a cometer un feminicidio con todas las agravantes posibles, así como el porqué de su negación de haber hecho algo malo, analizar la crisis del modelo burgués de familia y, sobre todo, creer o no en la influencia de las redes sociales en el comportamiento de los jóvenes.

Seis: Según la premisa general de la serie, cualquier chico de hoy podría ser Jamie, los cuatro episodios lo quieren dejar claro. Al salir del colegio, se metía en su cuarto, cerraba la puerta y se sentaba frente al computador hasta altas horas de la noche. Así quedaba atrapado en la vorágine de la ideología incel, acrónimo de "involuntary celibate” (célibe involuntario), que describe a una comunidad de jóvenes heterosexuales que culpan a las mujeres de su falta de relaciones con ellas y hasta de su abstinencia sexual, y expresan su frustración -y a menudo odio- en videos y comentarios misóginos (de nuevo el no hice nada malo). Esta comunidad forma parte de la "manósfera”, una red informal de foros de internet antifeministas, libros, creadores de contenidos y blogs que enseñan a niños y hombres a ser fuertes, tener éxito y estar en buena forma física y que el hombre exitoso es aquél que se acuesta con el mayor número posible de mujeres y también comparten fantasías violentas, humillaciones y consejos sobre cómo manipular a las mujeres. "Adolescencia” sugiere que no es sólo Jamie quien está familiarizado con esta subcultura, sino toda la juventud. Esto queda claro cuando el hijo del comisario explica a su padre el significado de varios emoticones en las redes sociales. Y Katie también entra en escena, ya que ella misma llama "incel" a Jamie (revictimizándola porque como Jamie no hizo nada malo, luego entonces ella es la culpable por no ser su pareja). Detrás de este escenario se esconde el aislamiento, la falta de nuevas masculinidades, la ausencia del padre por la crisis del modelo pequeño burgués, y también la total ausencia de capacidades sociales, el sexting, la sextorsión, el grooming e incluso la pornovenganza. 

Siete: Querides lectores, no hace mucho en términos históricos, el mundo occidental se preguntaba si la creciente dependencia hacia los medios de comunicación generaría una escalada de violencia entre los jóvenes ('A Clockwork Orange' 1971) dónde el querido Alex, sus drugos, sus vasos de leche (con algo más que leche) en el bar lácteo Korova, su brutalidad deliberada y «la elección moral» impresionarón tanto que incluso se prohibió en Inglaterra por más de 25 años; mas recientemente la fabulosa 'Kids' (1995) nos trasladó a las correrías de un grupo de adolescentes de Nueva York que consumen drogas y mantienen relaciones sexuales, con el sida planeando sobre sus cabezas, cuestionando si el abandono del modelo familiar llenaría al mundo de adolescentes VIH positivos. En el año 2000 'American Psycho' nos trajo la hipótesis de que el mundo de las finanzas, consumista, vacio, en dónde el éxito y la impunidad pretenden ir de la mano, generaría miles de yuppies asesinos en serie con transtorno TOC, aunque no terminó mas que en una película de humor negro mal valorada; incluso ya en el s.XXI los debates sobre la violencia sexual sugieren que el uso de pornografía puede estar relacionada con actitudes agresivas hacia las mujeres. Toca a ustedes decidir si hoy en día recibir un corazón rojo, verde, morado, amarillo o azul de prusia a través de Instagram son motivos suficientes para convertirte en un hombre aliado que promueve la igualdad de género y se opone a la discriminación y explotación de las mujeres o en el misógino más desalmado y psicópata. O ¿es que acaso todo es más complejo? 




Acerca del Autor:
Víctor Barragán, analista político, librepensador, a la izquierda del mundo, animalista, cultivador de Acacias, melómano y cinéfilo, estudiante de la fenomenología del relajo y del tequila, y carnal de "El Budún".
victor.barragan.357@gmail.com






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